Jesús y la Ley

Jesús, el Salvador del Mundo.

Bueno en el estudio anterior quedamos en dar a conocer quién era el personaje que moriría por los pecados de su pueblo. En todo Israel y el resto de la tierra, ni en los cielos, ni debajo de la tierra no había hombre alguno que pudiera realizar esta tarea, entonces dada esta situación Dios prometió que el mismo sería quien vendría a salvar a su pueblo. (Ezequiel 34:11-12).

San Juan 1:29 El siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo.

Juan el bautista identifica a Jesús como el Mesías, Salvador del Mundo.

Jesús y la ley.

Es común oír hoy en día, a las ramas tradicionales del Cristianismo, hacer declaraciones como “Jesús abolió la ley, por lo tanto ya no estamos bajo ley sino en la gracia” aunque hay algo de cierto en esta declaración los que se llenan la boca en decirlo no han comprendido.

Jesús mismo dijo que él no venía a abolir la ley y los profetas, refiriéndose a las escrituras del Tanaj o Antiguo Testamento como le conocemos hoy en día:

Mateo 5:17 No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar, sino para cumplir.

El mismo Jesús está diciendo “no he venido para abrogar” “sino para cumplir”. Póngale mucho cuidado a estas dos expresiones. Vamos a hablar de la segunda expresión “sino para cumplir”. Está palabra nos lleva a dos ideas. La primera es “hacer lo que la dice la ley”, podríamos decir “observar” la ley, y la otra “cumplir” de cumplimiento de profecía o de simbología. Jesús hizo ambas cosas, por ejemplo en la ley había ordenanzas dadas por Elohim donde decía que se tenía que sacrificar un cordero y rociar la sangre para perdón de los pecados, y esto lo hacía el sacerdote. Eso era un símbolo, de lo que había de venir, ya que aquel cordero y el sacerdote mismo, representaban a Jesús, en Cristo se cumple, es por eso que Jesús desde la cruz exclama “consumado es” (San Juan 19:30) todo está cumplido.

La segunda parte de la segunda expresión “sino para cumplir” también Jesús observó la ley, alguien podría preguntar si Jesús cumplió la ley porque los fariseos acusaban a Jesús de incumplir la ley? Leamos este relato de Mateo 12:1 En aquel tiempo iba Jesús por los sembrados en un día de reposo; y sus discípulos tuvieron hambre, y comenzaron a arrancar espigas y a comer. Viéndolo los fariseos, le dijeron: He aquí tus discípulos hacen lo que no es lícito hacer en el día de reposo.

Pero él les dijo: ¿No habéis leído lo que hizo David, cuando él y los que con él estaban tuvieron hambre; cómo entró en la casa de Dios, y comió los panes de la proposición, que no les era lícito comer ni a él ni a los que con él estaban, sino solamente a los sacerdotes? ¿O no habéis leído en la ley, cómo en el día de reposo los sacerdotes en el templo profanan el día de reposo, y son sin culpa? Pues os digo que uno mayor que el templo está aquí. Y si supieseis qué significa: Misericordia quiero, y no sacrificio, no condenaríais a los inocentes;

En la última frase está la respuesta a todo esto Misericordia quiero, y no sacrificio.

Jesús no quebrantó el día de reposo, solo que lo estaba cumpliendo de acuerdo a la voluntad de Dios, y no de acuerdo a las costumbres o tradiciones de los “maestros” de la época, es importante mencionar que los mandamientos, Dios los dio a Israel por medio de Moisés, pero los rabinos judíos agregaron una serie de mandatos y ordenanzas haciendo difícil de cumplir la ley de Dios, a esa serie de mandatos o doctrinas de hombres es lo que se le conoce como el talmud, y que Jesús lo llamó la levadura (doctrina) de los fariseos.

También es muy común oír decir si Jesús, observó la ley ¿Por qué no lanzó la primera piedra contra la mujer adúltera? En realidad la ley establece eso que citaron los fariseos “Y en la ley nos mandó Moisés apedrear a tales mujeres. (San Juan 8:5).

Pero porque Jesús no ejecuta la sentencia siendo que la ley lo mandaba y que el único libre de pecado en aquella escena era el mismo, lo cual automáticamente le daba el derecho para hacerlo. Bueno no lanza la piedra, porque él era el Salvador del Mundo o sea que él está diciendo ella no va a morir porque ya hay alguien que muera en su lugar, ahí se cumple esa ley y por eso que hoy día los que conocemos y nos sujetamos a la ley de Dios no lanzamos la piedra contra estas personas, pero si lo hacen los que aún están siendo esclavos de la maldición de la ley.


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